Seguimos con nuestro mes ´Detox´ y hoy compartimos el Q&A con Alina Topala, también conocida como Green Mama. Alina, autora del blog Green Mama, experimenta desde su infancia con ingredientes naturales y vegetales, creando platos que son una explosión de colores y sabores. En su primer libro nos propone más de 100 recetas vegetarianas y, sobre todo, sabrosas y sanas, para toda la familia. El hilo conductor de la obra son los ingredientes naturales, en particular las hortalizas y las frutas. Nacida en Rumania y afincada desde hace años en Barcelona, Alina es una apasionada de la alimentación sana.
¿Por qué decidiste crear Green Mama en el 2015?
Estaba experimentado cambios en mi alimentación y empezaba a ser más consciente del origen de los ingredientes que compraba, de la calidad de estos ingredientes y de cómo estos repercutirán en mi salud, la de mi familia y el impacto que causaban en el mundo. Me encontré inmersa en mucha información, no mucha de calidad, en esos momentos aún lo sano no estaba “de moda” y solo muy poca gente conocía información valiosa sobre como hacer el cambio de una alimentación comiendo de todo, a una alimentación más sana. Quise crear una comunidad para personas que como yo querían dar este paso y no sabían por dónde empezar, y así cree Green Mama, un lugar donde comparto recetas que aprendí en este camino, artículos de personas que admiro y que pueden aportar información de calidad para la comunidad, recomendaciones etc.
¿ Qué consejos darías para comer de forma saludable y con conciencia?
Empezar de a poco. Ser flexible y darse el lujo de “pecar” de vez en cuando. Ser curiosa, preguntar, leer las etiquetas, comer alimentos de temporada y en la mayoría locales, en lo posible de origen orgánico o de proximidad. No obsesionarse. Menos productos envasados, menos harinas blancas, menos procesados, digo menos porque nada de estos productos son sanos, pero si te ha pasado que has comido unas patatas fritas no es la fin del mundo, has pecado, disfruta si era lo que te ha apetecido en ese momento y luego vuelve de nuevo a cuidarte como antes. También es muy importante la manera en la cual cocinamos, con eso quiero decir que es importante cocinar más saludablemente: crudo, al vapor, a la plancha, salteados siempre utilizando grasas de calidad.
Empezamos el nuevo año y muchos de nosotros queremos priorizar nuestra salud. ¿Qué opinas de las ´dietas detox´?
Las dietas detox no van conmigo. Lo intenté una vez y quise pegar a mi marido ahahha. Aguanté dos días. Creo en descansos digestivos o ayunos intermitentes, en depuraciones hepáticas para darle un respiro al hígado, pero de manera saludable. Con esto quiero decir que si tú ya tienes normalmente un estilo de vida saludable: comer sano, hacer deporte, tomar el sol 10 min al día( cuando hace sol), tomar agua y respirar( es una práctica que hacemos automáticamente y no nos damos cuenta que papel tan importante en nuestra salud tiene una respiración consciente), si te preocupan los kilos después de los atracones Navideños, o después de las vacaciones etc. con solo volver a tu estilo de vida de antes basta, no hacen falta dietas detox o milagrosas. También añadiría la importancia de unas buenas infusiones naturales que nos ayudan a depurar. En mi caso también me funcionan bien los adaptógenos y la suplementación.
¿Que opinas de los productos lácteos y del gluten? ¿Son necesarios en nuestra dieta o podemos reemplazarlos por otros productos?
No soy nutricionista y no puedo recomendar nada a nivel nutricional. Pero, los “nuevos” nutricionistas y dietistas los demonizan y muchas afecciones están relacionadas con su consumo.
En mi caso los tengo bastante prohibidos y cuando no consumo lácteos ( solo consumo quesos) ni gluten, noto mejoras en mi estado de ánimo, en mi energía y también en mi cuerpo. Me diagnosticaron el hipotiroidimso de Hashimoto tras mi segundo parto. Puede pasar después de los partos y luego desaparece, pero en mi caso se ha quedado conmigo. Hay muchos estudios que relacionan el hipotiroidismo con el gluten, los lácteos, el café y otros alimentos que deberían ser eliminados. Yo aún no lo he conseguido del todo, estos son mis “pecados”.
Aparte de todo esto, existen muchos productos que sustituyen los lácteos y el gluten. Cómpralos con consciencia, algunos de estos productos llevan muchísimos azúcares malos y otras sustancias que no son tan sanas. En libros y en internet puedes encontrar muchas recetas de quesos veganos que puedes preparar en casa y que saben mucho a los de animales. También se están comercializando( creo que ya los has visto), te aconsejo que pruebes marcas locales y pequeñas. Mi consejo para los productos sin gluten es utilizar y comprar cereales que por su naturaleza no contienen gluten. Te dejo algunos ejemplos: trigo sarraceno, mijo, amaranto, maíz, tef, sorgo, arroz, quinoa( pseudocereal).
¿Que consejos darías para conseguir todos los nutrientes que necesitamos a través de nuestros alimentos ?
El primer consejo es de consumir los alimentos de temporada. Son mucho más ricos y la naturaleza es sabia, sabe que alimentos necesita nuestro organismo en cualquier momento del año. Consumir menos refinados, menos envasados y más ingredientes enteros. Que sean orgánicos/ de proximidad y que se cocinen de forma saludable para prevenir que esos nutrientes se pierdan.
¿Por qué recomiendas comer comida orgánica y de dónde consigues la tuya?
Los alimentos orgánicos no contienen químicos, sintéticos, ni aditivos, lo que los transforma en alimentos muy beneficiosos para nuestra salud. Contienen más nutrientes, mejor sabor y favorecen el comercio justo y de proximidad, entre otras. Cada vez más se están abriendo más tiendas de comida orgánica y cada vez más las marcas de toda la vida intentan hacerlo mejor utilizando solo ingredientes orgánicos y packaging sostenible. El mundo está cambiando y hay una necesidad de cambio también en las marcas. Tienen que hacerlo mejor.
Los productos frescos como la verdura y la fruta los compro a unos payeses que tienen el campo al lado de Barcelona. También tengo un pequeño huerto en casa donde cultivo las hojas verdes, hierbas aromáticas, frutas y alguna otra hortaliza que están en temporada. Los ingredientes secos, conservas etc. los compro en tiendas orgánicas especializadas. Intento comprar en las tiendas pequeñas de barrio, no en las grandes superficies. En mi libro escribo con más detalle sobre mi despensa y sobre cómo empezar una despensa más sana y orgánica, siempre en la medida de lo posible.
Y para los peques, ¿Qué recomendaciones darías para que empiecen a comer de forma saludable? ¿Alguna receta estrella?
Si son bebés, es muy fácil empezar desde las primeras comidas introduciendo los alimentos sin camuflarlos para que los niños empiecen a tener sus propias preferencias y que sepan lo que están comiendo. Cuando ya tienen un tipo de alimentación nada saludable, creo que es importante que empiecen de poco a poco a introducir alimentos más sanos y de quitar los malos. Ponerles siempre opciones saludables en la mesa, hacerles entender que lo saludable no es aburrido, que es delicioso y que se sentirán mejor por dentro y por fuera. Otra manera de que coman sano también es que nosotros seamos su ejemplo. No les podemos exigir que coman zanahorias en vez de la hamburguesa, si nosotros comemos delante de ellos esa hamburguesa.
En el desayuno, me gusta mucho improvisar y variar, así creandoles recetas según sus gustos. Los mimo bastante 🙂 Por ejemplo, a Gerard le encanta lo salado y el aguacate. Le puedo proponer varias recetas, pero siempre me pide su tostada con aguacate. A Júlia le gusta más el dulce, que intento utilizar lo mínimo de azúcar y a veces omitir. Ella pide más pancakes, gofres… Para endulzar los gofres o los pancakes, utilizo los plátanos maduros que son super dulces. También les preparo smoothies verdes donde les pongo hojas verdes tipo espinacas o acelgas, una base de fruta, jengibre , agua y/o leche vegetal etc. Con los smoothies pueden crear los smoothie bowls, en la base el batido, por encima la granola casera que hacemos juntos, nueces, cacao nibs etc. También es muy guay que se sientan involucrados en la creación de lo que van a comer y que hagan sus pruebas en la cocina. Esto construye una relación sana con la alimentación desde muy pequeños.
