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Desintoxica tu hogar por Charlie Lemmer de The Healthy Home Therapist

La clave para gozar de salud y felicidad en la vida es el equilibrio. A día de hoy, todos somos conscientes de la importancia de seguir una dieta sana y hacer ejercicio, pero de lo que no somos tan conscientes es del papel tan vital que tienen en nuestro bienestar otros factores como las relaciones, el estrés y, sobre todo, el medio ambiente. Creo que la importancia de nuestro entorno doméstico se pasa por alto muy a menudo pero, en realidad, está directamente relacionada con nuestra propia salud. Es esencial asegurarse de que tu hogar favorezca la salud de tu familia y no la comprometa. Hay una cosa que siempre digo a mis clientes: «puedes comer verduras ecológicas e ir al gimnasio todo el día, pero si vives en un entorno doméstico tóxico, nunca estarás sano».

Por qué desintoxicar

Se estima que estamos expuestos a alrededor de entre un 15 y un 20 % más de toxinas dentro de casa que fuera de ella, y dado que pasamos hasta el 90% de nuestro tiempo en casa (según la OMS) estos altos niveles de toxicidad pueden causar graves problemas de salud, desde dolores de cabeza y fatiga hasta enfermedades autoimmunes y cáncer, si no se abordan correctamente.

Los gases emitidos por los muebles, las alfombras y los productos de limpieza (liberación de gases residuales) contaminan el aire que respiramos y las superficies que tocamos. El Wifi y la tecnología producen radiaciones que nuestro cuerpo considera tóxicas. Es fundamental evaluar estas radiaciones, así como la calidad del agua y los posibles peligros como el moho, el polvo, etc. a la hora de crear un espacio interior saludable y sanador, pero eso no significa que tengamos que vivir en una casa con aspecto de clínica que carezca de estilo o belleza.

Aunque nuestros cuerpos están naturalmente equipados con los medios para desintoxicar algunos contaminantes ambientales, se estima que se enfrentan a hasta 10 millones de veces la radiación de la tecnología y, por lo menos, a 80.000 químicos más que nuestros abuelos, lo que significa que nuestros pobres hígados y cuerpos están luchando para hacer frente a este ataque cada vez mayor a nuestro sistema inmunológico.

Los niños son especialmente vulnerables a estos mayores niveles de toxicidad ya que no sólo pasan mucho tiempo gateando por el suelo sino que sus sistemas inmunológicos aún se están desarrollando. En los últimos años, la prevalencia del autismo, el TDAH y otras enfermedades autoinmunes han crecido exponencialmente y, aunque se necesitan muchos más estudios en este campo, la ciencia ya está mostrando vínculos directos entre el aumento de estas enfermedades y la sobrecarga tóxica a la que nos enfrentamos ahora en nuestras vidas.

Cómo desintoxicar

¡Pero no todo es pesimismo! Los avances en la tecnología (sí, la tecnología puede ser buena) y el aumento de la conciencia y los productos en el ámbito de los hogares e interiores saludables y sostenibles significa que hay un montón de soluciones para ayudarnos a reducir los niveles de toxicidad dentro de nuestro hogar y crear interiores que no sólo se vean frescos y nos traigan alegría, sino también crear un ambiente en el que nuestros cuerpos puedan realmente relajarse, regenerarse y curarse; optimizando nuestra salud y energía y ayudándonos a sacar el máximo provecho de la vida.

Hay soluciones para todos los presupuestos pero, por lo general, me gusta centrarme primero en el dormitorio como el espacio más importante. Es donde venimos a descansar y a regenerarnos y donde deberíamos pasar unas buenas 8 horas de nuestro día durmiendo. Por lo tanto, maximizar el potencial de este espacio para favorecer nuestra salud puede marcar la mayor diferencia en nuestro bienestar general.

Aquí te dejo mis mejores consejos sobre cómo crear un dormitorio saludable que optimice tu salud y, por lo tanto, aumente tu productividad, felicidad y alegría.

  1. Prohibe la tecnología: asegúrate de que todos los dormitorios (y esto es de suma importancia en las habitaciones de los niños y en las guarderías) no tengan ningún tipo de tecnología. Es importante tener nuestros espacios de trabajo/juego y de descanso claramente definidos para que no terminemos dejando que el trabajo ocupe el tiempo y las áreas que se supone que necesitamos para que nuestros cuerpos se restauren. Esto no sólo nos afecta a nivel mental sino que también tiene una enorme consecuencia física. La tecnología emite una luz azul que inhibe la producción de melatonina en nuestros cuerpos. La melatonina es la hormona que induce el sueño y al limitar su producción, obstaculizamos el ritmo circadiano natural del cuerpo y lo engañamos haciéndole pensar que todavía es de día cuando queremos dormir. Así que si te gusta ver la televisión en la cama o sueles quedarte escribiendo correos electrónicos a altas horas de la noche y no puedes dormir bien, esta podría ser la causa. Prohíbo toda la tecnología, incluyendo mi teléfono móvil, en mi dormitorio y el único dispositivo mecánico que permito es un reloj despertador que funcione con pilas. Los monitores para bebés emiten algunos de los niveles más altos de radiación con respecto al resto de dispositivos domésticos. Si quiere usar uno, es imprescindible que uses una de las marcas más seguras y que lo coloques a una distancia segura del cuerpo de tu bebé. También es importante evitar determinados flujos de corriente eléctrica y el simple hecho de colocar tu cama contra la pared correcta puede marcar una gran diferencia en tu sueño y en tu salud.
  2. Maximiza la calidad del aire: es esencial tener la mejor calidad de aire posible en tu dormitorio. Con suerte, te pasas respirando el mismo aire durante unas 8 horas por la noche, así que si respiras aire viciado y contaminado, no esperes que tu cuerpo se recupere y regenere de forma efectiva. Yo sólo uso pinturas ecológicas que no tienen VOCs (Compuestos Orgánicos Volátiles) en la decoración de mi habitación. Estas pinturas no emiten gases químicos a la atmósfera a diferencia de las pinturas comerciales, y no sólo son mejores para tu salud sino también para el planeta. Plantas cuidadosamente seleccionadas que emiten oxígeno en lugar de CO2 por la noche, ropa de cama hipoalergénica y un número limitado de alfombras (enormes acumuladores de polvo) ayudan a mejorar la calidad del aire para que puedas sacar el máximo provecho de tu descanso.
  3. Eco-Limpieza: limpia siempre tu dormitorio y el resto de tu casa con productos ecológicos sin químicos. Las toxinas emitidas por los detergentes químicos comunes son increíblemente peligrosas y dañinas para nuestra salud. Ponen una carga enorme en nuestros hígados, que tratan desesperadamente de expulsar estas toxinas del cuerpo y acaban en nuestros sistemas endocrinos (hormonales). En pocas palabras, tu cuerpo no va a ser capaz de descansar y sanar de un buen sueño si tienes que pasarte toda la noche desintoxicando tu cuerpo de todo el blanqueador que utilizas para limpiar el suelo. Además, dado que a nuestras queridas mascotas y niños les encanta arrastrarse por el suelo, ellos serán los que absorban en la mayoría de estas toxinas.

Las recomendaciones anteriores son sólo algunas de las consideraciones que hacemos al crear ambientes saludables óptimos para nuestros clientes. Estas son estrategias simples que pueden marcar una gran diferencia en tu sueño y en tu salud sin apenas ningún coste. Las herramientas más complicadas y costosas que podemos utilizar serían las pinturas y textiles bloqueadores de WIFI, las sábanas de tierra para las camas, las lámparas de infrarrojos, etc. Pero, en mi opinión, muchas veces los cambios sencillos pueden tener un efecto enorme, y siempre podemos ajustar más si es necesario para lograr resultados aún mayores. 

The Healthy Home Therapist.

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