
Si notas tu piel más apaga, seca y deshidratada te recomendamos empezar a hacer una doble limpieza con productos que ademas de limpiar aportan un tratamiento antioxidante, calmante e hidratante.
¿En qué consiste la doble limpieza?
Este proceso implica lavarse la cara con dos productos: un limpiador a base de aceite (base oleosa), que nos proporcionará los ácidos grasos (aceites) que limpian a la vez que nutren en profundidad. Este primer paso servirá para eliminar fácilmente las impurezas afines a la grasa, como el exceso de sebo, restos de cremas, protector solar, maquillaje y contaminantes. El segundo ayuda a retirar todas aquellas impurezas afines al agua, como los restos de polvo, las partículas de contaminación y las células muertas. Además, nos ayudará a eliminar cualquier resto de producto anterior para que quede la piel perfectamente limpia.
¿Cómo hacer una doble limpieza?
El primer paso de la doble limpieza consiste en un aceite limpiador o bálsamo. Aplícalo sobre la piel seca para trabajar el maquillaje, las toxinas, la contaminación, el SPF y el sebo. Asegurate de masajear el limpiador en la cara durante un minuto antes de enjuagar con agua tibia; esto ayuda a minimizar la irritación y la sequedad de la piel, muy importante si tiene la piel sensible o sufre de rosácea. Hoy hablamos del Recovery Cleanser un lujoso bálsamo limpiador, formulado con aceites puros y bio de moringa —una de las fuentes más ricas de antioxidantes del mundo—, oliva y bambú que te ayudan a luchar contra la acción oxidativa de los radicales libres que tanto afectan a la piel. Además, los extractos de caléndula y salvia lo convierten en limpiador muy respetuoso y muy hidratante. ¡Y también es muy relajante con un delicioso aroma fresco a romero, cítrico de la naranja y ligeramente dulce de la lavanda.
¿Cómo usar Recovery cleanser?
1) Coge una avellana de producto en tus manos y caliéntalo un poco.
2) Aplica el producto sobre la piel seca y masajea durante 30-40 segundos.
3) Añade unas gotas de agua para facilitar la emulsión: verás que el bálsamo se transforma en una ligera leche.
4) Elimina los restos de producto y suciedad con muselina de algodón orgánico.
5) Seca tu piel a toquecitos con una toalla de algodón (sin arrastrar para no agredir la piel).
Después de enjuagar el aceite limpiador, pasa al segundo limpiador, que debe ser uno a base de agua. Masajea durante un minuto antes de enjuagar con agua tibia. Este tipo de limpiadores penetran mejor en los poros y ablandan la suciedad por lo que eliminan de forma eficaz todas las impurezas y dejan los poros más limpios, lo que visiblemente te ayudará a que se vean más pequeños.
Seguimos con los productos de Dafna´s Skincare y para este paso recomendamos el Purify Cleanser un limpiador en formato gel-loción que limpia profundamente la piel sin agredirla. Entre su exquisita formulación destacan los aceites y extractos antioxidantes (como el extracto de Granada, el aceite esencial de Geranio y el aceite MelaCareTM) que reducen el estrés oxidativo producido por un exceso de radicales libres, a la vez que ayuda a igualar el tono, atenuar las manchas y reducir el acné hormonal.
¿Cómo usar Purify cleanser?
1) Coge dos pulsaciones de producto y aplica sobre piel seca.
2) Masaje unos segundos. Si quieres, puedes añadir agua para una emulsión ligera y suavemente espumosa. Su exótico aroma de jugo de higos lo convertirá en tu limpiador favorito.
3) Retira con abundante agua tibia o ligeramente fría.
4) Seca tu piel a toques con una toalla.
Resultandos de la doble limpieza
✔Nos ayuda a limpiar en profundidad nuestra piel
✔Retira las células muertas
✔Hace que penetren mejor los productos de tratamiento que aplicaremos posteriormente
✔Nos ayuda a reducir el acné y las imperfecciones
✔Mejora la salud, luminosidad y textura la piel
✔Es un ritual muy placentero y relajante que, con los productos adecuados, también nos llenará de bienestar